Es una sensación única y especial que te hace sentir una seguridad y una tranquilidad especial cuando estas con esa persona, y que solo sientes con ella.
En ese momento no te importa lo que te pueda pasar, lo único que te importa es ella, todos tus pensamientos se nublan, y lo único que puedes ver es su sonrisa...
Los temores e inseguridades desaparecen, dejas todo en el olvido, lo encierras en baúl con candado y tiras la llave al mar. ¿Qué importa nada si estás con esa persona?
Da igual el tiempo que haga, lo que digan los demás, o lo rápido que pase el tiempo, porque por mucho que digan que cuando se pasa bien el tiempo pasa más rápido, se disfruta cada minuto como si fuera el último, y se exprime hasta que no queda nada y cae el último grano de arena del reloj.
Por eso, porque yo lo he sentido, puedo afirmar varias cosas, y una de ellas es que...
Un día pudo ser suficiente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario